De todos es sabido que la cocina es la habitación más importante de la casa, donde hoy en día, muchas familias se reúnen para el desayuno, el almuerzo y la cena, pero sobre todo es el lugar de la casa que transmite calor y familiaridad. Por eso debe ser diseñada y escogida con la máxima atención y paciencia.

Pero para afrontar ésta complicada tarea, es bueno saber los pasos que hay que dar y más si es la primera cocina. No se trata de convertirse en un auténtico experto solo para comprarla, pero es necesario informarse muy bien para poder tomar una buena decisión, ya que no es como comprar un par de zapatos o una aspiradora.

La forma más rápida y segura de abordar la compra de la cocina, ya sea para una vivienda de banco nueva o para reformar, es a través de un distribuidor, tienda o estudio, con marca de muebles reconocida o genérica.

Aquí describimos los 5 pasos básicos para la compra de la cocina.

1. El diseño

El diseño es de lo primero que se debe afrontar, entre otras cosas para poder hacer un presupuesto. En Arcomobel ofrecemos un servicio de diseño gratuito que gracias a los nuevos software en 3D y simulaciones es muy fácil de visualizar para cualquier persona. Pero para poder hacerlo, hay que elaborar primeramente un croquis con las medidas de la estancia o disponer de un plano de planta de la vivienda, aunque también es posible solicitar una visita a domicilio para que un técnico pueda hacer las mediciones pertinentes.

En éste punto, es elemental tener en cuenta los gustos, las necesidades, el estilo de vida y la composición de la familia para saber cómo se va a utilizar la cocina, algo que no siempre se considera debidamente.

Por otro lado, lo peor que se puede hacer, es seguir al pie de la letra los consejos de alguien que seguramente nada tiene que ver con la cocina. Por ejemplo, si se trata de una reforma, lo de dónde ubicar el fregadero, la salida de humos, o si es preferible colocar una isla o no, es mejor dejarlo a un profesional del diseño.

2. Elegir los muebles

Los materiales de los muebles es un punto muy importante a tomar en cuenta, ya que determina el aspecto final que tendrá la cocina, su funcionalidad, durabilidad, estética y por supuesto, su precio.

Cuando se habla de modelos, los más populares son los laminados, maderas, lacados, que se refieren a los frentes y puertas, es decir, el material exterior, pero además, hay que tomar en cuenta los detalles del cuerpo o casco, tipo de bisagras, guías de cajones y caceroleros, accesorios y herrajes extraíbles.

Hay otras cosas que es bueno saber, como por ejemplo, que un mueble con puertas cuesta menos que ese mismo mueble con cajones, o que los herrajes extraíbles o especiales ofrecen más comodidad en la cocina. Y en cuestión de precios, los muebles de cocina tienen gamas muy distintas según la marca y modelo y cada una de ellas cubre un importante segmento del mercado según la necesidad de cada persona.

3. Escoger la encimera

Las opciones para la encimera son más limitadas, pero tampoco son fáciles de escoger, ya que el material y su aspecto juegan un papel sumamente importante en cada cocina. Acogedor, moderno, clásico o simplemente práctico. Sea cual sea el estilo, la encimera es capaz de realzarla o hacer que pase desapercibida.

Desde las más usadas y por orden de precio ascendente, están las laminadas, madera maciza, granito, cuarzo y porcelánico hasta otras menos usadas como el mármol, cristal, acero inoxidable y piedra acrílica y las diferencias radican en la resistencia al trato diario al que están sometidas, la estética -colores y acabados- y el precio.

¿Que nadie en casa es cuidadoso en la cocina?, entonces lo mejor es descartar el laminado, cuarzo, mármol y piedra acrílica, pero si se tiene un mínimo de cuidado, cualquiera de las opciones es excelente según el caso.

4. Seleccionar los electrodomésticos

Los electrodomésticos, fregadero y grifo son parte muy importante de la cocina, que han ido incorporando mejoras y prestaciones impensables hace pocos años.

En cuanto a la estética, el acero inoxidable y los integrables siguen dominando el mercado y por supuesto, el gusto del comprador, que cada vez se fija más en la calidad y la eficiencia de cada aparato. Empezando por el frigorífico, que es el electrodoméstico que más consume, la lavadora, el horno y el lavavajillas le siguen y son los que más atención deberían tener al comprarlos, por eso, escoger los aparatos con etiqueta A++ o superior es la mejor decisión para que no se conviertan en un dolor de cabeza y un disgusto para el bolsillo.

Por su parte, la inducción cada vez es más asequible, consume poco por su rapidez y actualmente cualquier utensilio para cocinar es apto, aunque siguen existiendo chefs fanáticos de las placas de gas. Por su parte, no hay nada más desagradable que una campana que no aspire y haga un ruido infernal, así que la campana extractora hay que escogerla no solo por su estética sino por su capacidad de absorción y por el ruido que produce.  La gama de marcas, modelos y precios es muy amplia, tanto que podemos encontrar, por ejemplo, un horno Beko por menos de 200 euros o uno Gaggenau por más de 4.000. Una esmerada selección de materiales exclusivos y un proceso de fabricación perfecto son la clave y el motivo de su costo.

5. La compra

Ésta es la etapa de la acción, donde se ratifica el presupuesto definitivo del modelo que se ha elegido y donde hay que prestar atención a lo escrito. Cada detalle debe estar especificado claramente, con la lista de todos los componentes de la cocina, accesorios, encimera y electrodomésticos con modelo y referencia. El tiempo de entrega estimado es muy importante establecer claramente y no dejar nada como supuesto, incluso planos y simulaciones 3D.

La garantía de la cocina debería establecerse por escrito y suele ser de 2 a 5 años, aunque algunos fabricantes ya están ofreciendo hasta 10 años en sus productos. La de los electrodomésticos es de 2 años en la UE, pero hay planes que permiten ampliar esa garantía y puede ser una opción muy ventajosa. El costo final debe incluir impuestos, transporte y montaje.

Suerte y que disfrutes de la cocina soñada.

 

Fuente:

cocinasconestilo.net